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“No basta sólo con oír la música en cada uno de los momentos en que va existiendo. Hay que poder relacionar lo que se oye en un momento dado con lo que se ha oído en el momento inmediatamente anterior y con lo que va a venir después. En otras palabras: la música es un arte que existe en el tiempo”.
(Copland Aaron. ¿Cómo escuchar la música en el tiempo? Pág. 15. Fondo de Cultura Económica. México. 1975).
“El psicólogo Ehrenfels (1890) señaló que una melodía no se puede explicar solamente por sus tonos (elementos): haciendo una transposición de tonos, la melodía se conserva; lo que, de hecho, constituye la música es su Gestalt, la estructura típica de su secuencia tonal”.
(Schuster Martín – Beisl Horts. Psicología del Arte. Pág. 25. Editorial Blume. Barcelona, 1982).
“La música tiene el poder de combinar el sentimiento y el pensamiento sin necesidad de palabras”.
(Yehudi Menuhin y Curtis W. Davis. La música del hombre. Pág. 28. Fondo Educativo Interamericano S.A., Bogotá, 1979).
¿Los niños son el presente y tienen futuro? Según la Organización Mundial de la Salud (OMS):
“Más de 250 millones de niños corren el riesgo de no alcanzar su potencial de desarrollo”.
OMS
“Sólo en este año, según el reporte de Medicina Legal, han muerto en todo el país más de 50 niños al mes por violencia intrafamiliar”.
Perico Mariño, Cristian Camilo. (5 de octubre de 2022) A pesar de las denuncias por acoso, Gabriel González tenía permiso para llevarse a su hijo. Página 12. El Espectador.
Entrevisté a Sky Ángela Cuéllar Palacios, 13 años de edad, quien fue tercera finalista en la Voz Kids en el año 2022.
1. ¿Cree que es muy importante que todos los niños, niñas y adolescentes aprendan primero música y después otras materias como matemáticas?
“Creo que todos los niños y adolescentes deben hacer lo que les inspira hacer, si a un niño le gusta las matemáticas dale un libro de matemáticas, si a otro le gusta la música regálenle una guitarra; nunca obligues a nadie a ser lo que no le gusta hacer porque será infeliz toda la vida”.
2. ¿Cuáles beneficios ha experimentado y vivido, en su salud emocional, mental y física, cuando canta?
“Como lo que a mí me gusta es la música entonces cuando canto me hace muy feliz, emocionalmente me inspira e inspira mi creatividad”.
3. ¿Cómo hacer un mundo mejor y más seguro para evitar peligros que violenten la salud emocional, mental y física a los niños, niñas y adolescentes?
“Creo que es el acompañamiento, enseñanza y educación de los padres para los niños; si a un niño le enseñan con paciencia y con amor lo que sea que al niño le guste, eso hará un mundo mejor para todos en el futuro”.
Profesionales destacados en el sector salud nos brindan sus aportes:
Carmen Graciela Zamora Reyes (CGZR), médico cirujano de la Universidad Juan N. Corpas, Pediatra de la Universidad de Buenos Aires, vicepresidenta de la Sociedad Colombiana de Pediatría – regional Bogotá, docente de Pediatría Social de la Universidad de la Sabana, docente de salud pública de la universidad del Bosque, Profesional especializado del Grupo Infancia de la Secretaría Distrital de Salud.
¿Cómo un pediatra puede diagnosticar el dolor en un niño quien todavía no habla? (CGZR): “Bueno nosotros desde pediatría identificamos el dolor en los niños por su irritabilidad, realmente ellos cuando son muy pequeños no siempre refieren donde es el dolor, pero el llanto de ellos es característico, incontrolable, no se calman ni en brazos de la madre. Para evaluar la intensidad del dolor tenemos unas escalas con figuritas (escala de Wong-Baker) que nos ayuden a definir qué tan intenso es el dolor, pero su aplicación suele ser en niños mayores de 3 años”.
El doctor Víctor Hugo González Cárdenas (VHGC) Médico y cirujano (U. Rosario), Anestesiólogo (puj), Subespecialista en medicina del dolor y cuidado paliativo (Fucs), Master en anestesia regional (U. Salamanca), fellow en dolor crónico pediátrico (U. McGill), epidemiólogo clínico (U. Bosque), (maestrante) bioingeniería y nanotecnología (U. Central – Fucs), profesor asociado e investigador de la facultad de medicina (Fucs), profesor clínico, facultad de medicina, U. Sabana y U. El Bosque, anestesiólogo – algesiólogo, los Cobos Medical Center y Hospital Militar Central, Investigador senior, Minciencias. Editor senior – Revista Colombiana de Anestesiología.
1. La terapia biopsicosocial es la mejor manera de tratar el dolor en niños, niñas y adolescentes; ¿ésta en qué consiste y qué se opone a ella?
1. (VHGC): “Por muchos años el dolor crónico en niños y adolescentes había sido un área muy poco explorada. De hecho, se desconocía hasta el 2000 una real incidencia de la enfermedad. Ese año, el Dr Perquin publicó un artículo observacional en la Revista PAIN, con los resultados de un estudio transversal desarrollado en Holanda, en el que mostró a la comunidad mundial una enorme prevalencia de esta condición, la cual estaba muy por encima de un cuarto de la población pediátrica en general. Diferentes autores publicaron sus incidencias en Norteamérica y Europa delatando que estas cifras incluso podrían ser mayores. Y más preocupante aún, que el 5% de estos niños y adolescentes tenían un dolor tan severo, que los hacía abandonar su actividad social, la vida escolar, recluirse en centros hospitalarios y deteriorar de manera impactante su salud. No obstante, ya para dicha fecha, la IASP (Asociación Internacional para el Estudio del Dolor) en conjunto con la OMS (Organización Mundial de la Salud) habían establecido al dolor como un signo vital en la atención médica, y al manejo del dolor como un derecho humano fundamental. A pesar de ello, varios investigadores, como el Dr. Peng entre 2004 y 2008, publicaron sendos análisis criticando la falta de cobertura en el manejo del dolor a nivel mundial, a pesar de lo establecido por la IASP y OMS. Por ende, las prevalencias siguieron igual, e incluso de acuerdo con Cofelt y Groenewald, esto empeoró, incrementando los gastos en atención en salud, a un nivel bastante alto. Muchos pensaron que una forma de ayudar a gestionar su valoración y manejo podría provenir de mejores herramientas para valorar el dolor. Hasta finales de la primera década de este siglo (hacia el 2010) se realizó un estudio en pos de valorar de una manera mucho más integral el dolor en niños, este fue el estudio Ped IMMPACT en cabeza del Dr. McGrath por el que se guió la evaluación en dominios. Sería tan positivo su impacto, que no solo mejoró la calidad de la valoración, sino que a partir de él se cimentó una terapia mucho más específica: la terapia biopsicosocial. Tratamiento que basado en los dominios de evaluación, incorporó los mejores tratamientos de múltiples disciplinas en pos de asegurar un efecto positivo en todos los dominios de valoración y por ende de intervención. Es por ello que se integraron Psicología, Medicina, Fisioterapia, Enfermería y Trabajo Social, en un nicho interdisciplinario de acciones, sincrónicas, con similares objetivos. Por décadas el tratamiento se dividió de manera poco eficiente y cada quien trabajaba en su área sin intervenir en la pericia de los demás. Sin embargo, el desarrollo de enfoque y de las ciencias convergentes, hizo que esta unión de saberes, juntos, pudieran converger para crear conocimientos y terapias divergentes.
En palabras más sencillas, antes se pensaba que un medicamento debía curar una condición independiente de otros factores; de hecho que había condiciones que solo mejoraron operando, inyectando, o haciendo alguna terapia. Hoy en día se sabe que los mejores resultados no se obtienen de dicha manera, sino, a través de la terapia bio-psico-social.
Un niño o adolescente que es abordado de esta manera, recibe una valoración de al menos 90 minutos por un equipo interdisciplinario con previo conocimiento y discusión de la historia clínica del paciente. De dicha reunión y exploración física se discuten las hipótesis acerca de los orígenes del dolor y a partir de allí, cada integrante del equipo proyecta intervenciones en su área, las cuales se deben engranar en pos de objetivos principales y un objetivo general. Dicho abordaje toma algunos meses de ejecución, la cual requiere un seguimiento constante y específico. El resultado de dicho trabajo es muy impactante, y al final, en un buen porcentaje de casos, conduce a la cura y mejoramiento del individuo.
Es triste saber que hoy en día, es vasto el desconocimiento que se tiene acerca de este abordaje en nuestro país. Mientras que en Colombia prevalece la atención de diversos y heteros frentes, en Canadá, el grupo para el estudio del dolor crónico Pediátrico de la Universidad de McGill (en cabeza del Dr. Pablo Ingelmo) no sólo reluce por su esfuerzo científico y asistencial en el estudio y tratamiento de estos casos complejos sino que también son distinguidos como grandes abanderados a nivel mundial en el tema y son primer referente de la aplicación de dicha terapia, con la cual se han conseguido importantes resultados para la región. Hechos deseables de replicar en nuestro país”.
2. ¿Es una realidad la posibilidad de que un niño, niña o adolescentes pueda generar una dependencia a algún medicamento contra el dolor, (analgésico)?
(VHGC): “Cuando los objetivos de la terapia NO han sido orientados bajo la más íntegra valoración, sin aplicar los filtros de tratamiento y se expone de manera riesgosa o injustificada a medicamentos de control, no solo los niños y adolescentes, sino también cualquier ser humano se puede poner en riesgo. Nuestro cuerpo es único y su complejidad es inmensa; al presentar dolor, se malinterpreta su significado y por ende, los tratamientos que requiere. Si sientes dolor, y consultas por él, se tiende a prescribir tratamientos para desaparecer como dé lugar.
Lo más habitual es la inclusión de medicamentos muy fuertes y de cuidado dado su mecanismo de acción. Allí aparecen por ejemplo los opioides como la morfina, los cuales, de hecho son bastante efectivos pero no son la solución para la presencia del dolor. En muchos pacientes con enfermedades incurables, como aquellos con Cáncer en estado avanzado, son tratados de manera paliativa ofreciendo una reducción significativa de su dolor, y en algunos casos, un total control del mismo a través de intervencionismo analgésico; no obstante, se sabe que en dichos estadios la enfermedad sigue avanzando y el dolor muy posiblemente reaparecerá. Sin embargo, en el dolor crónico no oncológico, mal conocido como dolor crónico benigno, el paliar el dolor no es el objetivo, sino la búsqueda incesante de las causas del mismo para poderlo tratar y curar. Esta, tal vez es la principal diferencia en el estudio y tratamiento del dolor crónico no oncológico en niños y adolescentes con respecto a los adultos, la intención curativa de las causas del dolor a partir de estrategias interdisciplinarias en abordaje bio-psico-social. Ya entendiendo esto, es claro que debemos procurar por una reducción en la exposición a medicamentos de control en estos pacientes, dado su potencial, en no solo generar efectos adversos, y en algunos casos riesgosos (como los derivados del uso prolongado con Opioides), sino también, que ellos pueden provocar una pérdida notoria en la oportunidad de recibir un tratamiento específico que pueda llevar efectivamente a su cuerpo a buscar un proceso de cura y mejorar el afrontamiento del dolor y todos aquellos retos fisiológicos y patológicos que imponga su vida, la familia y la sociedad”.
3. ¿Cuál es la mejor forma para que los niños, niñas y adolescentes sepan cuándo se trata de un dolor agudo o un dolor crónico y cómo manifestarlo al equipo médico que los atiende?
3. (VHGC): “El dolor para todos nosotros es bastante claro, de hecho nadie puede decir que nunca ha sentido dolor físico. La dificultad recae cuando ese dolor se vuelve una molestia, o incluso, una enfermedad. A pesar de que podemos clasificarlo de muchas maneras, la forma más utilizada está definida en términos del tiempo.
Normalmente un dolor aparece y desaparece en términos de minutos, horas o días. Lo cual no siempre se puede predecir. Por ejemplo, cuando practicas un deporte y recibes un golpe, presentas dolor, y en general ese dolor está avisando que una parte de tu cuerpo presentó una lesión, y por ende, el cuerpo inicia un proceso de reparación. Por ende, es particularmente útil considerar que solo ese dolor podría desaparecer hasta que exista una recuperación completa de los tejidos afectados, independiente que la intensidad del dolor sea alta o baja. El problema radica en cuánto tiempo debemos esperar para que esto pase, y sobre todo, qué y cuánto debemos esperar cuando no hemos tenido una lesión y lo único que aparece es el dolor. Internacionalmente se recomienda un periodo de al menos tres meses, tiempo en el que, bajo condiciones normales, debe haber desaparecido, por ende todo dolor, con o sin causa conocida que dure más de tres meses se debe considerar dolor crónico. De hecho, se ha asociado este dolor crónico, de larga duración con significativos impactos en la organización de sistema nervioso, y a su vez, con deterioro de la funcionalidad en actividades del diario vivir (como dormir, practicar deportes, desempeñar labores escolares, asistir y participar en actividades sociales, etc). Cuando se presenta un dolor de menor duración para ser considerado dolor crónico, pero ha impactado en las actividades del diario vivir, en la salud mental, y afecta tanto al individuo como a la familia y/o la comunidad, podríamos pensar que es muy probable que ese dolor va a convertirse en dolor crónico, y lo único que falta es que cumpla el criterio de tiempo. Hecho, necesario para diagnosticarse.
Recomiendo que ante un dolor impactante, siempre consultemos a un médico, el cual no solo tiene el entrenamiento, sino las cualidades suficientes para abordar el estudio y manejo del dolor, y que en casos de severa intensidad, mala o poca respuesta a los manejos convencionales, complicaciones o una elevada probabilidad de ellas, o requerir un manejo avanzado, como el citado abordaje bio-psico social, pueda ser direccionado a un equipo de manejo Interdisciplinario para prevenir o tratar el dolor crónico y sus severos impactos”.
La doctora Esmeralda Moreno Gutiérrez (EMG), nutricionista dietista de la Universidad Nacional de Colombia, coach nutricional certificada, actualmente labora en la ciudad de Villavicencio, con más de 15 años de experiencia ayudando a personas con sobrepeso y obesidad para lograr el cambio en el estilo de vida y modificar la composición corporal, nos comparte sus conceptos profesionales.
1. Con base en su experiencia como nutricionista:
¿Cómo se puede mejorar el cubrimiento periodístico en temas de nutrición de niños, niñas y adolescentes, desde su investigación, publicación y difusión nacional e internacional?
(EMG): “Creo que la mejor manera es lograr que el tema se torne interesante para las personas del común y para quienes toman decisiones relacionadas con educación, salud y prevención ya que las estadísticas locales y mundiales en temas relacionados con el sobrepeso y la obesidad en niños y adolescentes son desalentadoras.
Escribir y divulgar con frecuencia temas educativos en nutrición puede empezar a hacer la diferencia, desde un consultorio, en la escuela, en la comunidad, en las redes sociales, entrevistas, entre otros; es un trabajo donde muchos actores son protagonistas. Es fundamental ponernos la camiseta y pensar en lo que queremos para nuestros niños y adolescentes”.
2. ¿Cuál es la mejor manera de informar los temas de nutrición en niños, niñas y adolescentes para prevenir y tratar la obesidad o sobrepeso?
(EMG): “Es fundamental conocer e informar sobre las estadísticas actuales y las proyecciones, 1/5 de la población mundial será obesa en el 2025 si la tasa de las personas con sobrepeso sigue aumentando al ritmo actual (revista científica The Lancet); si nos paramos un momento a imaginar el futuro es preocupante y debemos informar, sensibilizar y lograr cambios a nivel personal, familiar y comunitario y la única manera de lograrlo es mediante el trabajo en equipo”.
3. ¿Cuál es la mejor de conseguir que los niños, niñas y adolescentes tengan una alimentación saludable y consuman las porciones que requieren según su edad y crecimiento?
(EMG): “Actualmente nos encontramos con exceso de oferta de comidas ultra-procesadas y bebidas azucaradas sin ningún tipo de control; es común encontrar familias completas con baja ingesta de proteína, vitaminas, minerales y fibra en la alimentación diaria. Es un panorama difícil de cambiar a menos que empecemos campañas educativas masivas y se establezcan controles en la comercialización de éste tipo de productos, por ejemplo, pautas tan sencillas como promover la ley de obesidad, una ley que desde el 2009 existe pero no se regula ni implementa de manera responsable.
Por otro lado, el nivel de actividad física en términos generales ha disminuido de manera muy considerable; muchas horas en actividades sedentarias y frente a pantallas, altos niveles de estrés y ansiedad además de mala calidad de sueño están promoviendo los altos porcentajes de obesidad a nivel nacional.
Los videojuegos y los celulares se han convertido en las mejores niñeras y se encuentra que por cada 10% de inversión en tecnología aumenta la prevalencia de obesidad en 1.4% mientras que por cada aumento del 10% en ejercicio se puede prevenir en un 2%.
La obesidad es una enfermedad multifactorial pero los factores mencionados tienen gran impacto por lo cual se debería trabajar para lograr que cada uno de ellos sean impactados positivamente, por ejemplo con las guías basadas en alimentos pueden influir de manera positiva en la alimentación familiar y se deben integrar a las políticas y programas nacionales de alimentación, educación, agricultura, educación y salud con el involucrar la mayor cantidad de entes gubernamentales o privados, a los medios de comunicación, a la empresa privada, a las comunidades, a las familias y al individuo”.
4. ¿Cuál es la mejor formar para reducir al máximo el consumo de la comida chatarra en los niños, niñas y adolescentes?
(EMG): “Las dinámicas familiares han cambiado en los últimos años, actividades como preparar alimentos en casa cada día son menos frecuentes, ambos padres trabajan y llegan cansados a casa por lo cual hay mayor consumo de alimentos de baja calidad y muy ricos en calorías lo cual ha promovido modificaciones muy importantes en el estilo de vida de los niños desde muy corta edad; con frecuencia se encuentra el uso de comida chatarra como premio lo cual es aceptado y valorado socialmente.
Es importante retomar hábitos como promover mayor consumo de alimentos frescos como frutas y verduras, preparar alimentos en casa y comer en familia, salir a realizar actividades al aire libre, disminuir tiempo de exposición a pantallas, promover la práctica regular de ejercicio, son tareas que podrían ser disfrutables en familia y cambiar de manera significativa las proyecciones actuales”.
Laura Cortés Mejía (LCM)
Psicóloga, actualmente vinculada con la Corporación Universitaria Minuto de Dios en el Programa de Psicología, docente universitaria, asesora personal y familiar. Psicología sistémica, Psicología humanista, desarrollo personal, Psicología clínica, terapia familiar. Psicóloga de la Universidad de La Sabana, magíster en Terapia Sistémica en la Universidad Pontificia de Salamanca en España, magíster en Psicología Clínica, en la Pontificia Universidad Javeriana.
¿Cuál es la mejor manera de informar para prevenir y tratar el tema de abuso sexual, maltrato verbal y físico en niños, niñas y adolescentes?
(LCM): “Es muy desafortunado y profundamente doloroso que niños, niñas y adolescentes sean víctimas de violencia verbal y/o física, así como de violencia sexual. Las familias y la sociedad tenemos una responsabilidad de cuidado que cuando no se asume, degenera en conductas que hieren la dignidad humana, que debilitan los lazos sociales y que al entorpecer la auto-realización también entorpecen las relaciones interpersonales.
De manera que es muy pertinente dedicar esfuerzos en la comprensión, prevención e intervención de dichas realidades, especialmente desde una posición humanizadora que favorezca el desarrollo integral del ser humano, de las familias y de la sociedad. Las conductas de violencia, maltrato, abuso suelen implicar dificultad para auto-regularse y para reconocer la dignidad de los otros seres humanos, así como la propia; pues cuando actuamos de manera violenta vamos decidiendo para nosotros mismos una identidad de violentos(as)/abusadores(as), que habría que reflexionar si es la identidad que se quiere para definir la propia existencia.
Por tanto, una clave que considero importante en la manera como se informa sobre estas realidades para favorecer su prevención y abordaje, es la de enfatizar en valores, en virtudes pues el ser humano por su propia configuración, es un ser capaz de consciencia y en proceso de realización, de manera que los valores, las virtudes, ofrecen una estructura que favorece la autoconsciencia y la consciencia del otro, siendo ambas fundamentales para la convivencia, es decir, para habitar este mundo “con” los demás. El ser humano es un ser moral y cuando se invisibiliza esa dimensión, vamos perdiendo humanidad y por tanto nuestras conductas pierden la posibilidad de contar con un marco de regulación que las humanice y entonces se puede terminar actuando por impulso y no por un ejercicio de libertad consciente y responsable.
Es interesante la definición que propone El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) sobre la violencia sexual: “Garantizar la atención integral, oportuna y generativa a los niños, niñas o adolescentes y sus familias que han sido víctimas de violencia sexual”; ya que puntualiza aspectos fundamentales como la necesidad de una atención integral, que lleva a deducir que también la prevención debe ser integral teniendo en cuenta todas las dimensiones que configuran al ser humano. También menciona una atención generativa, lo cual considero es de suma importancia, ya que implica que la prevención e intervención necesitan tener como objetivo el ser generadoras de recursos, posibilidades, oportunidades, de nuevas realidades que favorezcan el desarrollo maduro de las personas, las familias y la sociedad. Se necesitan iniciativas generadoras, que ilusionen y orienten hacia horizontes de desarrollo y realización, más que de cohibición y temor. Por ejemplo, no es lo mismo que una madre o un padre de familia decida no castigar físicamente a sus hijos(as) por temor a ser denunciado, a que pueda corregirles conociendo estrategias que les ayuden a cumplir la tarea de formación de sus hijos(as) desde el diálogo, la reflexión o la suspensión de privilegios; en este caso ambas partes ganan y se van configurando estilos relacionales más funcionales y propiamente humanos.
Un aspecto necesario de tener muy presente es la responsabilidad de evitar la revictimización. Dupret y Unda mencionan que “…la revictimización es el resultado de la implementación de inadecuados procedimientos de atención que trazan una ruta llena de obstáculos, y que no respetan la vivencia penosa de la víctima, reactivando emociones negativas en relación con el delito y propiciando una repetición de la experiencia de violencia…” (p.2). Las familias y las instituciones necesitan ser informadas desde la investigación académica por ejemplo, sobre el manejo idóneo de situaciones de violencia de manera que se eviten la revictimización y también por otro lado, la falsa denuncia. Es muy importante cuidar de la presunta víctima, pero al mismo tiempo, llevar los debidos procesos para esclarecer las situaciones antes de generar señalamientos no sólo legales sino también sociales ante el(la) presunto(a) agresor(a). Conviene seguir favoreciendo iniciativas que nos ayuden a conocer más de estas realidades y de su abordaje, pues son más frecuentes y cercanas de lo que tal vez pensamos, por lo cual todas las personas tenemos la responsabilidad de aportar desde nuestros contextos y relaciones a la prevención, acompañamiento y tal vez intervención de estas realidades de vulnerabilidad humana y de oportunidad de realización personal, familiar y social”.
REFERENCIAS
De la Fuente, C. (2021). Violencia sexual. Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF). Recuperado de https://www.icbf.gov.co/programas-y-estrategias/proteccion/violenciasexual#:~:text=Abuso%20sexual%3A%20El%20ni%C3%B1o%2C%20ni%C3%B1a,f%C3%ADsica%2C%20fu erza%20o%20amenaza
DUPRET, Marie-Astrid y Nathalia Unda (2013). “Revictimización de niños y adolescentes tras denuncia de abuso sexual”. En: Universitas, XI (19), julio-diciembre, p. 101-128. Quito: Editorial Abya Yala/Universidad Politécnica Salesiana.
Dayana Bravo Arboleda (DBA), Fisioterapeuta egresada de la Universidad del Rosario, profesional con énfasis en Salud Ocupacional y ergonomía en el trabajador, y especialista en Cuidado del Adulto Crítico UCI de la misma Universidad del Rosario. Esposa y madre de dos (2) niños.
Con base en su experiencia en el sector salud:
1. ¿Cómo se puede mejorar el cubrimiento periodístico en temas de salud de niños, niñas y adolescentes, desde su investigación, publicación y difusión nacional e internacional?
(DBA): “Desde el pregrado me enseñaron que la verdadera evidencia está en la investigación, conocer de primera mano lo que realmente es fiable, mediante estudios con una base de evidencia muy alta.
Es por esto que los profesionales de la salud estamos siendo preparados para llevar una información verídica y confiable ya que es parte de nuestra formación y de nuestro «gen» profesional, es como el mapa que te lleva al tesoro, los estudios en investigación son la única herramienta que tenemos para poder conocer y crear guías de manejo y protocolos en salud.
La mejor forma de cubrir el periodismo en salud es siempre ir a la fuente correcta; el profesional de salud tiene la capacidad y la habilidad de proporcionar una adecuada información basada en la evidencia. Este periodismo debe ser un espacio en el que el profesional de la salud permita al usuario, en este caso el lector, entender con facilidad los temas que se informan y darle aún más importancia en los medios de comunicación como en redes sociales, periódico, y demás”.
2. Para fortalecer el periodismo en salud ¿Cuáles son las principales recomendaciones que les da a los periodistas que cubren los temas de salud emocional, mental y física en niños, niñas y adolescentes?
(DBA): “Buscar a los profesionales integralmente, es decir trabajar un tema de la mano de varios especialistas que lleven al periodista a tener herramientas completas de información y no sólo quedarse con la información de un especialista, pues el ser humano debe ser visto desde todas las áreas ya que una enfermedad, patología, malestar o como lo quieran llamar, debe ser visto desde todas las esferas que pueden afectar en la vida de los niños y adolescentes”.
3. ¿Cómo considera que es la mejor manera de informar para prevenir y tratar el tema de abuso sexual, maltrato verbal y físico en niños, niñas y adolescentes?
(DBA): “La prevención del abuso sexual es algo que en mi concepto, todavía tiene muchas falencias en la manera cómo se da la información y en cuál campo emplearla; considero que la mejor forma es llegar a los padres de familia para así evitar errores. La sociedad y la situación laboral de muchas familias, obliga a que como papás dejemos nuestros hijos en manos de desconocidos e incluso personas del núcleo familiar que pueden llegar a vulnerar y lastimar de forma física y emocional a nuestros hijos; están a la merced de personas poco conocidas y no hay penas estrictas que sancionen a los victimarios.
La información debería ser la misma tanto en las instituciones educativas como en los hogares; mostrar la verdadera cara y la realidad de cómo identificar cuando un niño puede ser abusado y cuando ha sido abusado. Seguir protocolos de manejo tanto emocional como físicos. Como mamá cometo muchos errores pero siempre
estoy pendiente de qué sucede en el entorno alrededor de la formación de mis hijos; espero ser siempre una guía para ellos, y seguiré siendo hasta que me permita la vida ser su tutora directa”.
Para concluir es vital que haya un avance de una mayor integración para continuar brindado un mundo mejor para todos los niños, niñas y adolescentes por medio del periodismo de salud y programas infantiles; con la mano de la medicina, la música y los medios de comunicación.
Por otro lado, fomentar campañas publicitarias donde se otorgue una mayor información en prevención y tratamientos de salud de los niños, niñas y adolescentes; así mismo como evitar, denunciar y castigar todo tipo de violencia psicológica, física y sexual contra ellos.
Aporto estos cuestionamientos permanentes:
¿La salud en los niños, niñas y adolescentes realmente es una prioridad en la actualidad? ¿Cuáles son los beneficios de la música en la salud de los niños? ¿Cómo hacer un mundo mejor y más seguro para evitar peligros que violenten la salud emocional, mental y física de los niños, niñas y adolescentes? Hay muchas preguntas para lograr nuevos y mejores avances fortaleciendo el periodismo de salud y programas infantiles, con apoyo de la medicina, la música y los medios de comunicación.
El trabajo periodístico en salud, realizado durante varios años y publicados en el blog del periódico El Espectador, dirigido por el Doctor Alberto Donadio Copello, Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar, continúa hoy con la mira puesta en los niños, las eternas víctimas en todos los conflictos personales, familiares y sociales.
La cifra de cincuenta niños asesinados mensualmente en Colombia es una alarma para dar prioridad a esta lamentable situación en procura de una atención con respeto profundo a los derechos fundamentales de la población más vulnerable.
El odio embrutece y enceguece. Contra esto todos podemos aportar amor, fortaleza, ejemplo y dignidad. El Estado debe disponer de caminos institucionales de rango constitucional. No cabe dilación alguna.
Insinúo la aplicación de los artículos 213 y 215 de la Constitución Nacional por grave alteración de la convivencia ciudadana y por constituir una grave calamidad pública
La defensa de la vida de los niños amerita la aplicación de estos regímenes de excepción los cuales permiten una mejor selección del personal encargado de las Comisarías de Familia.
Gracias por compartir estas experiencias y conocimientos desde diferentes aristas. Es muy importante seguir informando, aprendiendo, compartiendo y construyendo sobre el derecho a la salud y como todos podemos contribuir a su protección, especialmente en el caso de los niños, niñas y adolescentes.
En estos días es muy importante centrarnos sobre la prevención de la salud y aun más si se trata de los niños, niñas y adolescentes, por lo que debo felicitar la iniciativa de este blog para incentivar en tomar conciencia a través del periodismo de salud a fin de fortalecer los programas sanitarios en favor de la niñez que es el futuro de las nuevas generaciones. Por ello, reitero las Felicitaciones!!!
Hola Jorge: muchas gacias por leer y comentar.:)
Los niños son la esperanza del presente y el futuro. Debemos velar por su bienestar, tienen derecho a una vida sin violencia, explotación o abuso de cualquier tipo.
La infancia es una etapa maravillosa, no hay pasado, no hay futuro; sólo un presente que se mira con inocencia e ilusión.
Felicitaciones Verito por tu interesante Blog.
Hola Pía: mil gracias por tu tiempo de lectura. Un abrazo